(Abajo está la traducción de Eucharist: My Bread Broken on this website.)
“Si no dejas que se rompa tu pan para que bendiga
y alimente a otros, no habrá vida en ti.”
Cuando esto dijo, los demás se alejaron.
Todos quieren una vida mejor,
más vida, y más grandiosa que la dada.
¿Dónde está el punto? ¿Existe tal cosa?
¿Dónde está el punto? ¿Quiero ir ahí?
MI pan, MI todo,
Todo lo que me es caro,
¿Debo dejar que se rompa?
¿Cómo podría ser?
¿Dejar que se rompa mi pan?
¿para QUÉ?… ¡Me ahogo!.
“Sin pan, sin rotura,
“Moriremos”, dijeron.
Y se alejaron.
¡Oh!, ahí está el roce en mi alma:
MI Pan, MI PAN…
No se debe partir.
Lo quiero como lo quiero
por qué, dónde y cuándo.
Yo lo decido…. y punto.
Debes de tener pan,
tu propio pan. No lo puedes dar,
o deja que se lo lleven.
¿Dejar que se rompa tu pan?
¿Dejar que se ROMPA como se ha de romper?
¿Permitirlo o NO?
¿El Pan roto
no me hará un fracasado?
“¿No acaso lo perdemos de todas maneras?
No nos lo podemos llevar.”
No, pero aun así nos sustenta.
El pan roto, las esperanzas, sueños, ilusiones
y las cosas que casi nunca se cumplen…
porque la vida no se ajusta lo suficiente,
sólo te rodea a ti y a mí.
No puedo partir mi pan…
me lo ha partido la vida.
“Pobre de mí”, el único pan que tenía…
La con-miseración es lo que me hace seguir
seguir y seguir, más y más,
una y otra vez, de vuelta a donde comencé
…¿a menos que parta mi pan?
¿preciosos planes para que las cosas sean lo que deben?
¿lo que yo, tú, ella y él
simplemente deberíamos de ser?
La quieta vocecilla interior
que llama donde sea,
el dónde, el cómo y el por qué carece de razones,
el loco llamado desde un lugar desconocido…
Así que, a menos que parta mi pan,
¿no habrá vida en mí?, ¿en lo que hago?
O sólo sentiré la terrible ausencia de algo…
Me dijeron que sería feliz; que estaría a salvo,
La Certeza y la Seguridad, mis fieles compañeras, merman.
¿Dónde, dónde está el pan que he de partir?
La hermana Lea
(Nuestra más profunda gratitud a Cinthia De Gortari por su fina traducción profesional de este poema.)
One thought on “La Eucaristía: Mi pan roto”